"The Littoral of Pacific Colombia and Eduador"
Artículo de revista
Geographical Review
Vol. 29
No. 1, Jan., 1939
2022-06-20
spa: Pocos americanos se dan cuenta de que la costa continental más raramente vista y menos conocida
y menos conocida en todos los aspectos geográficos no se encuentra en las
en las antípodas, sino más bien cerca, y más allá del umbral de una de las rutas comerciales más importantes del mundo.
umbral de una de las rutas comerciales más importantes del mundo. Todos los días,
año tras año, los vapores entran y salen del Golfo de Panamá, regresando de, o con destino a, innumerables mercados en viajes interoceánicos: pero el
pero la más rara de todas sus rutas es la que conduce a lo largo de la costa tropical que
que forma una gran ensenada del Pacifico entre el Darién y los salientes del Ecuador.
salientes del Ecuador. En medio de este tramo se encuentra Buenaventura, una ciudad
cuyo equipamiento portuario y comercio no son ajenos a una constante procesión marítima. Los caminos hacia allí y hacia fuera, sin embargo, conducen
menos a la costa que a cruzar el mar abierto, rutas que dejan las costas adyacentes muy por debajo del horizonte e incluso las montañas, siempre que puedan
pueden ser
a través del velo del cielo, medio hundidas bajo la curvatura de la tierra.
curvatura de la tierra.
Esta oscuridad no es una condición nacida de los tiempos cambiantes. Por el contrario
Por el contrario, ha existido desde los días de los primeros descubrimientos. La exploración en su sentido más amplio se ha llevado a cabo por diversos motivos
a intervalos que se prestan bien a una agrupación histórica; pero el
pero toda la zona -sus atributos físicos y su vida- sólo se conoce
de forma puntual. eng: Few Americans realize that the continental seacoast most rarely
viewed and least known in every geographic aspect lies not at
the antipodes but, rather, close at hand, and just beyond the
threshold of one of the world's concentrated trade routes. Every day,
year after year, steamers go in and out of the Gulf of Panama, returning from, or bound for, countless marts on interocean voyages: but the
rarest of all their courses is that leading along the tropical coast that
forms a great bight of the Pacific between Darien and the projecting
salients of Ecuador. Midway in this stretch is Buenaventura, a city
whose harbor equipment and commerce make il no stranger lo a constant maritime procession. The tracks thither and away,however, lead
less coast wise than a cross the open sea, routes that leave adjacent foreshores far below the horizon and even the mountains, whenever they
can be
seen through the shroud of doudy skies, half sunk below the
curvature of the earth.
This obscurity is not a condition born of changing times. On the
contrary, it has existed since the days of earliest discovery. Exploration in its broadest sense has been carried on from diverse motives
at intervals that lend themselves well to a historical grouping; but the
whole area -its physical attributes and its life- is still known only
spottily.
- Artículos [249]